“Lo que Jesús quiso hacer era transformar el paradigma de la pesca y el pescado. Les habló de usar sus destrezas para alcanzar seres humanos. Era una convocatoria para explorar desde sus capacidades, cómo podían transformar lo que pensaban que eran ellos a cómo Dios les miraba”.
1, 2, 3, Pescao
Tragedia, dolor y esperanza
El espejo del solsticio
Meses atrás, surgió un movimiento masivo de pueblo que lo identifican como el Verano del 19. Ya no es verano. Mas bien es invierno. Ambos eventos caen luego de solsticios que apuntan a cuán cercano o alejado nuestro hemisferio está del sol. Es un nuevo año, mirándonos en el espejo de aquel solsticio. La diferencia del invierno al verano es que la distancia con el sol es mayor y la penumbra es mayor. Es como aquella madrugada del 7 de enero en la que se nos movió el piso.
Nos toca descansar y confiar
No te dejes engañar
“Seguir a Dios, muchas veces requiere ignorar la voz de quienes están disfrazados de piedad. Es llevar a cabo el discernimiento de lo que Dios nos quiere llevar a encontrar. En un año que habrá muchas ofertas de gobernanza y promesas en las cuales muchos se autodenominarán escogidos para llevarlas a cabo. Nos toca no creernos sabios en nuestra propia opinión y buscar donde está la voz de Dios para tu vida”.